En nuestros jardines crece la semilla de la obra Lasallista sembrada hace más de tres siglos por nuestro Fundador Juan Bautista De La Salle. En el 2005, cada institución lasallista sembró un “Árbol de los Cien Años” para celebrar el primer centenario de presencia de los Hermanos Lasallistas en México. Hoy este árbol frondoso de más de 6 metros viste uno de nuestros corredores principales de la Universidad La Salle recordándonos día a día que nuestro servicio humilde, cotidiano y de entrega, da frutos.
El espacio en donde descansan los prismas del monumento Atrévete a Ser fue por más de dos décadas, el único punto de encuentro para la Comunidad Lasallista. Era un espacio multifuncional: área de recreación y actividad física, para honores a la bandera y guardar automóviles, era el único patio con el que contaba la Escuela Preparatoria y de Administración. Hoy la Plaza Bicentenario abraza al monumento Atrévete a Ser, un conjunto de cinco prismas verticales de diferentes alturas y planta triangular, que apuntan al cielo. Su autor, el Hno. José Cervantes Hernández detalla en un poema la obra: “Juntos y por asociación”. Así nos quiso La Salle. Comunidad, modelo nuestro universitario: cada uno diferente, y cada quien embonando en el conjunto. …En todas las estaciones, en todos los inviernos y veranos, en los turbiones o en las claridades inocentes, estas columnas aquí quedarán, testigos del encuentro con el amigo que, en la veracidad y en el amor, todos queremos ser, emblema, efigie, signo, como ellas, atrévete a serlo tú también.
Construida en 1913-1914 por el ingeniero, arquitecto y geólogo Don Manuel de Anda y Barreda, integró las técnicas de construcción más modernas es esa época como vigas de acero, instalación eléctrica e hidráulica y fue decorada bellamente con artesonados de yeso y paneles enmarcados. Cuando el predio fue adquirido por la Universidad en la década de los ochenta, se encontraba en condiciones deplorables. Hoy este inmueble es Patrimonio Cultural de la Colonia Condesa y alberga las oficinas del Centro Internacional de Educación La Salle, órgano responsable de la internacionalización en esta Casa de Estudios. Su amplio comedor y sala de junta, pueden ser reservados para reuniones y actividades.
La estatua colocada en Plaza La Salle es la primer réplica realizada de un original hecho en mármol de carrara que se encuentra a un costado de la capilla de la Casa de Formación de los Hermanos, en Tlalpan al Sur de la Ciudad de México. Don Luis Fern.
Es una escultura de una mujer sosteniendo en equilibrio la balanza de la justicia. Pisa con el pie izquierdo la cabeza de una serpiente que se encuentra sobre el código de normas jurídicas en defensa de los ideales y las virtudes que persigue la profesión. La Justicia se develó cuando la Facultad de Derecho cumplió 30 años, solicitando al escultor Carlos Espino que reflejara en una escultura el recuerdo de que, a pesar de la vicisitudes de la vida, siempre tenemos que enaltecer la bandera de la Justicia, Verdad y la Honestidad, fieles y siempre unidos a la misión Lasallista.
Espiral blanca de arte dinámico e innovador, al centro tiene una esfera roja que nos habla de verdad y unidad, representando el corazón que une a la Comunidad Lasallista. Se develó cuando la FAMADyC cumplió 35 años de existencia, convocando previamente a un concurso a alumnos de Arquitectura. Obtuvo el primer lugar, la pieza arquitectónica “La belleza y la verdad son mis pilares fundamentales” del equipo conformado por Álvaro Carrera y Sergio López, asesorados por el profesor Arq. Pedro Vázquez Estupiñán.
Con el propósito de crear una experiencia cordial al acceso a nuestras instalaciones, el corredor principal de entrada a la Unidad I, comenzó una etapa de remodelación que incluía una fuente que llenara de vida y energía el ambiente, y diera la bienvenida a nuestra comunidad Universitaria. La fuente es un muro levantado con mosaicos de bloques pequeños de fragmento de piedra; cantos trabajados y ensamblados, donde resalta la frase de Leonardo Da Vinci “Señor, tú nos das los dones, pero nos pides a cambio la fatiga”.
Adornando el vestíbulo del Teatro De La Salle en la Facultad Mexicana de Medicina, se encuentra el mural “La Historia de la Medicina” del Hno. Antonio Carrillo. Trabajado por secciones y pintado en Puebla, el mural de 12 m de largo x 2.40 m de ancho evoca épocas, pasajes y personajes de la historia de la medicina, incluyendo a los griegos, egipcios, los alquimistas, la herbolaria, los microscopios, resonancia magnética y todos aquellos que aportaron algo en la evolución de la ciencia médica. La Historia de la Medicina da vida al espacio cultural, social y académico que ofrece el Teatro a toda la Comunidad Universitaria.
El edificio 1D albergó hasta 1974, en el sexto, séptimo y octavo piso, la Casa de los Hermanos Lasallistas. Después del terremoto de 1985 se sometió a remodelaciones, que incluían la restauración de un mural, creación del Hno. Antonio Carrillo. No fue posible contrarrestar el deterioro ocasionado por el paso del tiempo y la humedad, por lo que se remplazó por uno nuevo. El mural, también del Hno. Carrillo, incluye varios elementos como una escena de Dios y la creación del hombre, a la derecha los más destacados filósofos griegos y a la izquierda los intelectuales modernos signos de la humanidad, reflejando la unión de pensamientos en el campo de la educación, la filosofía, la teología y la poesía.
En el año 2002, la entonces Escuela de Arquitectura Diseño y Comunicación, lanzó una convocatoria para crear una propuesta plástica que representara los íconos de estas disciplinas. La propuesta ganadora fue presentada y desarrollada por el Arq. Fidel Meraz, quien logró sintetizar en esta obra de talla majestuosa dividida en 13 módulos, los hitos relevantes en la evolución de la arquitectura, el diseño y la comunicación. Puedes visitarlo en los pasillos de la FAMADyC, edificio 2C.
Para conmemorar el 35 aniversario de la Universidad La Salle se solicitó al renombrado escultor y pintor Manuel Felguérez realizar un mural inspirado en la heráldica de La Salle. Curvas y relieves, vacíos, texturas y sombras rompen el símbolo de la Universidad, transformándose en libros. Este imponente mural viste la plaza central y corredores con nuestros colores institucionales.
Plaza vestida por una escultura en bronce, montada sobre una base cuadrada de piedra. La escena está compuesta por un hombre español, una mujer mexicana y una niña pequeña que surge como fusión de ambas culturas, a la que llamamos “el origen de una raza”: la raza mexicana. La Plaza ofrece una terraza con mesas y sillas para comer al aire libre cualquier tarde soleada.
Este reloj de cuatro caras dio la bienvenida al nuevo milenio a un costado de Plaza La Salle en enero del 2000. Construido en la cuna de los Relojes Monumentales, Zacatlán de las Manzanas, Puebla, muestra una cubierta de vidrio, descubriendo la belleza de su maquinaria. Sus engranes simbolizan el ir y venir de los estudiantes y docentes, su tic-tac simboliza el latido que da vida a nuestra comunidad, es por eso que en su interior cada semestre se guardan las cartas con las ilusiones de los alumnos de primer ingreso. En un momento muy emotivo, al finalizar su programa académico, recuperan sus cartas.
Resultado del trabajo fraterno entre docentes y estudiantes, este reloj de aluminio y latón se elaboró en los talleres de ingeniería, para conmemorar treinta años en la formación de ingenieros profesionales con valor. Representa la exactitud y la clave de su funcionamiento es la geometría y la inclinación. Se orienta conforme a las estaciones del año, los ajustes son astronómicos de acuerdo con la geometría de círculos y ángulos. La flecha a la vista (gnom) es la que proyecta la sombra en los números e indica la hora.
Con motivo de la celebración del 50 Aniversario de la Facultad de Negocios, se seleccionó una escultura que simboliza la actividad principal que se desarrolla en el mundo de los negocios, eligiendo dos manos que amistosamente se estrechan cerrando un trato ético y honesto como compromiso. Una Cápsula del Tiempo fue colocada dentro del Monumento de cantera y bronce azul, junto a una placa con pensamientos escritos por San Juan Bautista de La Salle en sus Meditaciones para los Maestros.
Tres piezas curvas, dispuestas casi entrelazadas, componen la escultura Luz del Milenio, representando cada una 1000 años de historia. La terminación en punta de las piezas de forma helicoidal representa la proyección hacia el infinito, equivalentes a la asociación física del movimiento tal como ocurre en la naturaleza: crecimiento de especies de árboles, turbulencias y remolinos; disposición de los astros y reacciones químicas tales como el fuego, e incluso la forma helicoidal en estructuras moleculares del ADN. La escultura que da vida a la Facultad de química es el remate visual desde el acceso principal, sirviéndole de identidad y referencia, brindando unidad al conjunto de edificios que le rodean; representando al “punto de encuentro” de la Comunidad que los habita.